No es un secreto que el mundo cada vez está más de cabeza y no podemos ignorar la sed de cambio que es más que obvio que necesita.
En nuestra opinión, el estado deplorable en el que actualmente se encuentra nuestra sociedad se debe, además de otras razones, a la falta de empatía y visibilidad de todos los niveles sociales, de todos los tipos de personas que existen, de las preferencias sexuales, de la identidad de género, etc.
Sabemos que la sociedad discrimina a toda persona que no entra en lo que es categorizado como “bonito” o “bueno”, es decir que todo lo que no coincide con las características que se asocian a nivel cultural y social con la belleza y lo que es “correcto” es simplemente rechazado, discriminado, ignorado y hasta maltratado por la sociedad. Esto al ser una conducta social que ya está arraigada a nuestra mente, causa a su vez falta de empatía, odio y des-humanidad contra las personas que no cumplen con los requisitos para ser aceptados.
Para ejemplo tenemos, entre muchos otros:
- El odio contra la comunidad LGBTI.
- El Racismo
- El machismo
- La discriminación por apariencia física
Esta conducta se ha vuelto tan común y está tan normalizada que ahora las nuevas generaciones discriminan, rechazan y odian todo aquello que sea simplemente distinto a ellos. Ya no importa si es una ideología diferente, si es una enfermedad, si es una capacidad diferente o si es una raza. Les basta con sentir que alguien es ligeramente diferente a ellos para tener la necesidad de atacarle.
Para aportar nuestro granito de arena y generar el cambio que el mundo necesita, en PAGANA tenemos una especie de creencias en las que nos guiamos para lograr este cambio.